Puede que no sea la chica más despampanante de todas,
pero algo tenía que conseguía hipnotizar a todos por igual. Puede que fueran
sus rizos ligeramente alocados acompañándola de lado a lado, o su pelo rojo carmesí
como si se tratara de una ligera pista de todo lo que había en su interior, o
aquella manera que tenía de contar las cosas invadiéndote de calma, excitación o
tristeza según como se fumara un LM o un Lucky tras otro. Pero ahora, no hay
ojos que hipnoticen, pues apenas es capaz de apartarlos del suelo. No hay rizos
ni pequeños destellos pelirrojos que la hacían tan especial, ni mucho menos
nuevas historias que compartir a la hora del café. Algo cambió tiempo atrás,
algo la cambió, dejándola un poco más rota. Puede que algún día vuelva a
invitarla a un LM para volver a disfrutar de ella, mientras tanto solo nos cabe
esperar a que su fuego vuelva a salir después de intentar arreglarse a sí
misma.
4 comentarios:
Qué historia más triste... Algo terrible debió de pasar, ¿no?
Un beso.
Pues nada, alegra esa cara y deja de escribir estas cosas.
¡Quiero verte más feliz y sonriente! ¡NO SEAS BOBA! Hazme caso...
¡UN SALUDO!
http://undiariopersonalmas.blogspot.com.es/
Recuerda que todos (o casi todos, intento no generalizar, porque no me gusta) pasamos por momentos feos y tristes. Pero hay que tratar de levantarnos con una sonrisa.
Besos.
Bonita entrada, triste realidad. Me encanta tu blog. Te sigo.
Besos.
Pásate: http://unaenamoradaquenocreeenelamor.blogspot.com.es/
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